sábado, 21 de marzo de 2009

The Sound of the Silence

En la eterna batalla contra el vacío de la existencia la cantidad de bajas es irrelevante, así como la logística o los contenidos y visiones estratégicas. Lo que sea que creó la existencia o realidad simplemente no tenía intención de darle un fin a lo que podría ser la base en la entropía de la esencia.

Es por tanto que no se puede perder, o ganar, en el conflicto que es buscar un punto fijo en la realidad, puesto que la imagen, la esencia y el contenido no son más que ilusiones resultantes de la necesidad de realidad, de tangibilidad y de existencia. Estamos obligados a sentir el “yo” como algo personal, único y poseído por nosotros. A fin de cuentas nuestras fronteras son justamente lo que nos define, el ser nos restringe a parecer y pertenecer.

Alejados del modelo demiúrgico terminamos creando individualidad y carencia de perpetuidad a nivel de flujo. Alojados en la forma y el concepto además de sentir un reconfortante sometimiento a lo prescrito y figurado no terminamos estancando y calcificando.

La falta de flujo es entendida como la carencia de movimiento a nivel superior, así como un apresado estigio que concentra almas opacas, es ese estancamiento espiritual incluso gnóstico el que perpetuamente marchita al ser. Así como árboles secos y muertos el hombre permanece y perdura sin algún valor en el espacio. Siendo siempre parte “de” más no complementando ese elemento.

Es por ello que la respuesta radica más en el “ser” más que en el existir. Puesto que la acción no recae solamente en el ocupar el espacio (el “existir” en una manera más básica). Al no realizar acción, ruido, golpe, destrucción a la par de creación el amplio espacio del mundo, de la realidad queda silencioso y opaco. La sinfonía de colores, formas y sonidos queda aplacada bajo sinuosos espacios plagados de leña muerta o sea de nosotros.

Es así que el sonido del silencio adquiere algo más, un peso y una angustia existencial. el tratar de gritar y ser apagado por el propio ser.

¿Tan peligrosa es la piedra de la locura?

¿Tan peligrosa es la piedra de la locura?